El filtro de Vegan Milker es el corazón del utensilio. Cuidar bien el filtro nos permitirá disfrutar de Vegan Milker por más tiempo, pues diseñamos un utensilio robusto, para toda la vida.

Vamos punto por punto con las nociones básicas para su buen uso y mantenimiento:

1- FILTRAGE DE LA PULPA:

Cuando la pulpa es muy grande (por ejemplo, cuando hacemos una horchata de chufa o almendras) y cubre casi toda la malla primero debemos remover la pulpa con una cuchara de madera o aplicar el truco de prensado express. Cuando veamos que la pulpa se encuentra a mitad de la malla o menos , y se la ve más seca, introduciremos el mortero de Vegan Milker, diseñado para presionar la pulpa y obtener las últimas gotas. Cuando llegamos al punto de extraer las últimas gotas de la bebida con la ayuda del mortero debemos hacerlo con cuidado. La postura ideal es la que aparece en la foto de la izquierda.

Lo que debemos evitar es presionar el mortero con toda nuestra fuerza, como se retrata en la foto de la derecha, ya que dependiendo de cada persona, a veces se llega a ejercer demasiada presión poniendo en riesgo el vaso filtrante. Es mejor dejar dos gotitas de leche dentro del filtro a forzar en demasía el vaso filtrante.

2- SACAR LA PULPA:

En Africa aprendimos la famosa frase de “¡Prisa mata amiga!”. Puede ser que algunas personas usuarias de Vegan Milker, cuando acaban de elaborar la bebida volteen el vaso filtrante y lo golpeen contra un plato, o a veces, contra un cubo, para sacar la pulpa rápidamente mediante unos golpecitos… Siendo el vaso filtrante el corazón del utensilio, aconsejamos tratarlo más amablemente y proceder a vaciar la pulpa final con una cuchara de palo, como se muestra en la foto adjunta.

3- LIMPIEZA DEL FILTRO:

Limpiar el vaso filtrante es un trabajo sencillo y rápido. Se puede hacer con la mano, con una esponja, una escobilla de fregar botellas…. y un chorrito de agua.

Lo más importante es limpiar el filtro inmediatamente después de su uso,sin dejar que la pulpa se seque dentro, ya que luego tendremos que raspar más.

Si realizamos bebidas que ensucian más el filtro, bien sea por el tinte que desprenden o por la mucosidad que las caracteriza, por ejemplo: zumo de uva, leche de avena o chía… aconsejamos limpiar el filtro con agua caliente y jabón.

4- LIMPIEZA DE LA MALLA:

Si nuestro filtro tiene ya muchas batallas culinarias notaremos que la malla del borde se va oscureciendo. Normalmente adquiere un ligero tono entre marrón que parece óxido, pero no lo es porque la malla es de acero inoxidable de la mejor calidad (360L). Ocurre que en los bordes del filtro con el tiempo se acumulan restos de pulpa que van haciendo un pequeña capa de suciedad.

Hemos preguntado a proveedores y fabricantes, pero ellos sólo nos informan de tratamientos químicos agresivos que no nos parecen adecuados de usar en un utensilio de cocina. Queriendo buscar una solución más natural hemos recurrido a los remedios de la abuela y nos hemos encontrado con el bicarbonato sódico. El resultado ha sido estupendo.

Se pone el filtro a remojo en agua templada con bicarbonato (1 litro de agua, 2 cucharadas de bicarbonato) y se limpia la malla frotándola con mucha delicadeza con un cepillo de dientes o mejor aún con un palillo fino de mesa.

Atención, esto no es una práctica diaria, ya que solamente tendremos que hacerlo cuando nos percatemos de que la esquina de la malla comienza a acumular mucho residuo de pulpas.

5- SECADO DE LA MALLA:

Es preferible secar el filtro con un paño después de cada lavado para evitar que elementos del agua del grifo como la cal, por ejemplo, lo vayan estropeando.

Con estos pequeños trucos, tu Vegan Milker by Chufamix te acompañará durante muchos años.

¡Que la disfrutes con salud y buenos alimentos!