Las infusiones son bebidas muy saludables. Las utilizamos a menudo en el desayuno, en las comidas, a media tarde… las tomamos por puro placer o con una función medicinal, como la de ayudar la digestión, a conciliar el sueño, a curarnos de una gripe…
¿Por qué no incluirlas en nuestras leches vegetales caseras? De forma muy sencilla obtendremos un alimento natural y muy saludable.
Consejos de elaboración
Modo Tradicional: Primero ha de calentarse el agua en una cazuela (1 litro o ½ litro) y cuando rompa a hervir añadir la planta o hierbas que nos gusten. A veces hay que hacer una decocción (cuando la hierba es muy gruesa o se utiliza la raíz), otras veces bastará con dejarla reposar entre 5 y 10 minutos. Después colar la infusión y ya tenemos el agua medicinal para integrarla en cualquier receta de leche vegetal.
Modo Express: Se pone el agua caliente (70ºC) en el recipiente de Vegan Milker. Se pone el vaso filtrante y dentro del vaso, las hierba junto con el resto de los ingredientes. Se bate todo junto y se filtra.
- La cantidad de hierba que se utiliza depende de los gustos y costumbres de cada persona, siempre y cuando respete lo que aconsejan los manuales de uso de las plantas medicinales. Como norma general, para la elaboración de la leche, aconsejamos utilizar dos cucharadas soperas ( colmadas ) por litro de agua.
- En el caso de utilizar la planta fresca, la cantidad que se utiliza para hacer la infusión es el doble, porque aún lleva agua.
Materia prima
- Es importante utilizar plantas de cultivo orgánico y locales , las puedes encontrar en tiendas ecológicas o mercados locales. Algunos bares también están ya vendiendo plantas medicinales y ofreciendo infusiones naturales en su establecimiento.
- Otra opción es recolectarlas en el campo. Los meses de la primavera son ideales para salir a pasear al campo y traer ramilletes de plantas medicinales. Les quitaremos la tierra u otras hierbas y las dejamos una semana o semana y media secándose entre papel o colgando el ramillete boca abajo en un lugar aireado ( a oscuras). Cuando las veamos secas, ya están listas para guardarlas en tarros, a poder ser en lugar oscuro, para que se conserven mejor sus propiedades. La mayoría de ellas mantienen sus principios activos durante un año después de haber sido cosechadas.
- También podemos utilizar la planta fresca. Si tenemos un espacio en casa donde las podamos plantar – un tiesto , maceta o en el jardín- podemos sembrar o plantar plantas medicinales para utilizarlas en nuestras infusiones.
En este link tienes un manual sobre el “huerto medicinal” donde puedes consultar dudas y aprender más sobre el cultivo y uso medicinal de las plantas. Si buscas un manual de libro, en versión papel, aconsejamos el libro de nuestro querido Mariano Bueno titulado “Cultiva tus remedios” (editorial: Integral) pues nos ha parecido especialmente práctico y está muy bien explicado e ilustrado, como todo lo que hace este hombre.
Algunas recetas elaboradas con Chufamix
Estevia, para endulzar: hemos probado hacer la leche de avena, arroz con infusión de estevia, ya que es una forma alternativa de endulzarla. También hemos probado a endulzar la horchata de chufas con ella, utilizando en este caso, la infusión fría. Aporta a la leche un toque entre anís y regaliz muy curioso.
Melisa, relajante: hemos probado la melisa con la leche de cáñamo, porque la tenemos a mano y crece en cualquier maceta y jardín. Cuando no sea época de limones, o no los tengamos a mano, podemos darle el toque limonero con esta infusión.
La menta, digestiva: la hemos añadido a la leche de alpiste y también a la de cáñamo para darle un toque de sabor. Es ideal para el verano.
La ortiga, depurativa: la ortiga la hemos probado con las leches de cereales y también la de alpiste. El sabor apenas se nota pero es una forma de obtener las maravillosas virtudes de esta planta tan menospreciada hoy en día. (link de la video receta a modo express)
Frutos del bosque, vitamínica: también la hemos hecho la prueba haciendo la leche de avena con infusión de frutos del bosque. En este caso leche se vuelve de color rosáceo, pero el sabor varía demasiado. (link de la receta a modo tradicional)
0 comentarios