Esta es un receta que la hemos aprendido con nuestra amiga Ainhoa (Araba, Euskadi), la cual es una excelente cocinera y además, para nuestra suerte, es “chufamixera”. Ella nos ha enseñado un sencillo truco para reciclar la pulpa sobrante de la leche de avena a partir de copos. Resulta que esta pulpita es ideal para mezclarla con harina y hacer unos “tacos” (también llamados “chapatis” o “talos” ) para el desayuno, comida o cena. El proceso nos llevará, como mucho, 15 minutos.
Veamos cómo se hace!
Ingredientes:
- La pulpa sobrante de la leche de avena (50 gramos de copos en seco)
- 50 gramos de harina de trigo* (o harina de fuerza)
- una cucharadita de aceite de oliva virgen
- una pizca de sal
*Conviene utilizar la harina de trigo que más gluten tiene, la que se utiliza para repostería tradicional, para que la masa sea lo más flexible posible.
Preparación:
Se pone en un vaso transparente la pulpa de avena y se le añade la misma cantidad de harina de trigo*(1:1). Se amasa la mezcla y se va añadiendo harina hasta que conseguimos la textura de la masa para hacer el pan.
Una vez hayamos conseguido hacer una bola de harina sin que se nos pegue en las manos y está lista para cocinar.
- Se espolvorea la encimera de la cocina con harina para evitar que se pegue la masa.
- Se coge un cacho de masa del tamaño de una albóndiga, se redondea entre las manos y se pone en la encimera.
- Le damos un golpe con la palma de la mano para que se coja forma más plana (a lo hamburgesa) y con un rodillo de madera la extendemos bien hasta que tenga la forma de una base de pizza.
- Ojo, cuando le pasamos el rodillo para extender la masa, tenemos que ir espolvoreando harina para que no se nos pegue. Amasar hasta que quede fina.
- Mientras tanto, ponemos una sartén al fuego (sin aceite) y cuando esté caliente, ponemos el “chapati” a calentar.
- A fuego medio, en 10 minutos tenemos un delicioso chapati o taco que sirve tanto para el desayuno, como para comidas y cenas.
El taco es muy versátil y acepta tanto rellenos dulces como salados. Para enrollarlo es mejor hacerlo cuando aún está templado, pues una vez que se enfría pierde elasticidad y se nos puede romper en el intento.
- Si nos sobra masa, la dejamos en forma de bola y envuelta en un trapo húmedo para que no se seque. Nos aguantará bien 24 horas a temperatura ambiente.
- Hemos intentado hacer esta misma receta con otras harinas pero con peor resultado, pues quedan más rígidas y frágiles, aunque de sabor, están buenísimas.
- Si vemos que la masa se rompe fácil, añadir una cucharadita más de aceite a la masa.
- Por último, deciros que si os da pereza o no tenéis tiempo de amasar la pulpa con la harina, podéis dejar la pulpa extendida directamente en una sartén caliente (sin aceite) y se irá secando hasta convertirse en una galleta fina y crujiente de avena ideal para el desayuno.
Nos encanta conocer las múltiples opciones saludables que tenemos a mano.
¡Gracias Ainhoa por tu aportación!
Seguimos aprendiendo…
Hola Chufamixeros
Estoy encantada con mi Chufamix y las leches vegetales que me preparo. Lo que más me costaba era el uso de las pulpas… las guradaba y guardaba, pero al final no sabía bien que hacer con ellas, hasta que de repente se me ocurrió mezclar con la cascarila del Psyllium (Plantago ovata), que se usa mucho en los panes sin glúten para darles la elasticidad. Así que me puse manos a la obra y mezclé todas las pulpas que tenía de hacer 1 Litro de cada una de estas leches: avena (en copos 50g), de quinoa (en copos 60g), de cáñamo (pelado 100g con aprox. 20g de bayas goji), de arroz (cocido 100g). Luego le eché a ojo el psyllium (serían unas dos cucharadas soperas), una cucharada sopera de semillas de lino, también a ojo eché la sal, y una cucharadita de azúcar morena. No necesité nada de líquido, ya que mis pulpas estaban humeditas, y me puse a mezclar. En cuanto el Psyllium absorbe la humedad, la masa empieza a coger consistencia y se mezcla mejor. Dejé reposar la masa en un cuenco tapado con un trapo, y tras 8 horas hice una torta gigante y algo gordita y la metí en el horno , sin forma ni nada (mantiene la forma gracias al Psyllium) y la horneé a 180°C durante unos 45 minutos. Quedó muy graciosa, como una hogaza plana; doradita por fuera y esponjosa por dentro.
Después de ver la idea de Ainhoa, voy a probar la mezcla en una sartén y con tortitas más planitas, seguro que también salen bien.
Muchos saludos
Mapi
Hola Mapi,
ese es el espíritu chufamixero que nos lleva a descubrir nuevos alimentos mediante el reciclage. Gracias por compartir tu receta casera en este apartado, ya que así vamos aprendiendo cada día un poco más. Un fuerte abrazo!
Hola, yo también estoy encantada con la Chufamix, y estaba necesitando ideas para aprovechar el bagazo, especialmente el de avena. Normalmente, lo utilizo para hacer hamburguesas.
Hola Silvia,
gracias por compartir.
Nos encanta saber que recicláis las pulpas de vuestras leches vegetales.
Utilizas la receta del blog para hacer las hamburguesas o haces tu propia versión? Agradeceremos muchísimo cualquier variante que aporte ideas al resto de la comunidad.
¡Salud y que tengas un buen día!
Hola muchas gracias por la receta, estoy recien explorando el mundo vegano y estoy maravillada, yo le agregué una pizca de polvo de hornear para darle esponjosidad y una vez hechas las fui dejando dentro de una bolsa, eso ayuda a que mantenga la humedad y su flexibilidad
Hola Jessica, muchísimas gracias por tu aportación. Que buena idea!! Tomamos nota!